domingo, diciembre 06, 2009

Orquídeas que sanan

Dones curativos de las esencias florales
Valeria Gómez Rodríguez - EL ESPECTADOR
En lo más profundo del Amazonas podría estar la solución a sus problemas. Las orquídeas, aparte de ser flores hermosas, tienen bondades curativas. Sus esencias contribuyen al crecimiento personal, al autoconocimiento y a la revitalización del cuerpo y alma. Al menos así lo cree la doctora Norma Enciso, médica bioenergética.
Foto: Júpiter
Si siente que hoy es un día gris, la orquídea color puede aportarle la luminosidad que le hace falta a su vida. Si le parece que es una persona posesiva o dependiente, la orquídea corazón puede ayudar a que gane confianza; si se encuentra agobiado por los problemas, la orquídea alegría quizá transforme sus debilidades en oportunidades.
“Las orquídeas tienen la facultad de estimular o apaciguar los estados de ánimo”, explica la doctora Enciso. Un conjunto de 18 esencias florales, como la orquídea amor, coordinación, corazón e inspiración, entre otras, cubren el espectro de desequilibrios emocionales del ser humano.
Asimismo, las orquídeas poseen habilidades curativas que actúan sobre el orgullo, el odio, el egoísmo, la inestabilidad y la codicia, restauran la fluidez de la energía del cuerpo hasta equilibrarla con la energía de la mente.
Los tratamientos florales pueden ser aplicados tanto en niños como en adultos. En cuanto a los resultados, hay quienes dicen haberlos sentido inmediatamente, otros no parecen percibir su efecto y algunos pacientes se percatan de ellos después de un tiempo.
Para quienes no creen en este asunto, la doctora Enciso, quien participó en el V Congreso Internacional de Terapias Alternativas y Fototerapia realizado en días pasados en Bogotá, aseguró que “las esencias florales pueden funcionar en los escépticos porque liberan su carga energética en el cuerpo. Sin embargo, cuanta más conciencia haya al tomar la esencia, mejor va a ser el resultado”. Así que es una decisión personal.
(...)
Hace más de 80 años Edward Bach, médico bacteriólogo y homeópata inglés, descubrió los remedios florales y sus poderes curativos. Desde entonces no se ha dejado de estudiar el tema. En 1990, Andreas Korte, un botánico alemán, cautivado por el misticismo de la selva amazónica, empezó a investigar por primera vez en la historia las bondades curativas de las orquídeas colombianas y a aprovechar su potencial medicinal.
Esta alternativa médica cuenta con el apoyo de la Organización Mundial de la Salud, institución que recomendó el uso de sistemas curativos bioenergéticos como las esencias florales.

http://www.elespectador.com/impreso/vivir/articuloimpreso171708-orquideas-sanan

viernes, diciembre 04, 2009

Descubren la orquídea más pequeña del mundo

El hallazgo se ha producido en lo más profundo de las selvas ecuatorianas y, como sucede a menudo, ha sido por simple casualidad. Allí, con sólo 2,1 milímetros de tamaño, con sus diminutos pétalos transparentes de apenas el grosor de una célula, esperaba paciente una flor hasta ahora desconocida, una nueva especie de orquídea que, además, es la más pequeña de todo el mundo.
El botánico norteamericano Lou Jost, uno de los mayores especialistas en orquídeas, la encontró escondida entre las raíces de una planta mucho mayor que había recolectado para su estudio en la reserva natural de Cerro Candelaria, en plena cordillera andina.
«Me di cuenta que bajo la planta, entre sus raíces, había una flor diminuta que enseguida me pareció mucho más interesante que la orquídea grande. Observar atentamente las flores suele ser la mejor manera de identificar la especie de orquídea que tienes delante, y de saber si te encuentras o no ante una nueva especie».
Algo que, para el señor Jost, debe de resultar casi habitual ya que, con ésta, ya son 60 las nuevas especies de orquídeas que ha encontrado durante la última década. Jost trabaja en la fundación ecuatoriana EcoMinga, la misma que creó la reserva natural en la que ahora ha realizado su último descubrimiento.
«Encontrar una nueva especie es una sensación excitante -asegura el científico-. La gente piensa que ya todo está descubierto, pero lo cierto es que hay mucho más». Por ahora, su descubrimiento más importante se produjo al encontrar hasta 28 especies de orquídea del género teagueia, un grupo que se creía formado por solo seis especies.
Hasta el momento, y sólo durante el último siglo, se han encontrado ya más de 1.000 nuevas especies de orquídea, casi todas en Ecuador, a medida que caminos y carreteras se han ido abriendo paso hasta sus regiones más remotas.

JOSÉ MANUEL NIEVES - MADRID

domingo, noviembre 08, 2009

La Leyenda de la Isla de Java

El conde Oswald de Denterghem, en su libro Orchidées, publicado en 1894, nos narra una hermosa leyenda:

"Una orquídea de extrañas hoja, Macodes petola, es objeto en Java de una leyenda que el botánico holandés Blume (1796-1862) nos relata con gracia. Habiendo sigdo testigo de los fracasos y la deseperación de jardineros y orquideófilos que, a pesar de todas sus atenciones veían morir a esta preciosa planta, el botánico holandés, que unía a una profunta ciencia una fina y vivaz inteligencia, un poco socarrona, disfrutó sin duda al contarnos la tradición popular que atribuye im origen divino a esta orquídea admirable. Los javaneses la llaman Daun petola, lo que al parecer significa 'planta de hojas vivamente coloreadas que recuerdan a un maravilloso tejido de seda'. Antiguamente, según los folcloristas de Malasia, apareció en la isla de Java una diosa de asombrosa belleza. Su cuerpo estaba recubierto de fascinante seda de brillo incomparable. Había llegado para inspirar a los indígenas elevados sentimientos, pero eran tan rudos y estaban tan pervertidos que, no contentos con permanecer sordos a sus exhortaciones, la cubrieron de injurias y blasfemias y la obligaron a refugiarse en bosques inaccesibles, en el fondo de escarpados barrandos. Cansada, debilitada y, sobre todo, entristecida, se desprendió de su ropa y la dejó sobre unas piedras musgosas, a la sombra de tupidos árboles, antes de volverse hacia los hombres, ya no dulce y clemente, sino hosca e irritada. Los más audaces temblaron ante su visión, los más rebeldes se sometieron, todos imploraron el favor de poder conservar su radiante echarpe como símbolo de perdón. La bella diosa no pudo satisfacerles, pero llevada por la compasión, les permitió comtemplar por última vez el maravilloso tejido celestial, la petola, antes de partir hacia los cielos con él. Por suerte los javaneses - y para nosotros los amantes de las orquídeas- las rocas sobre las que la diosa había depositado su velo conservaron la imagen de aquella seda de origen divino. ¡ese fué el origen celeste de Macodes petola!
"Apenas se divulgó el nacimiento de la planta milagrosa, acudieron curiosos y devotos de todas partes para contemplarla. Se produjo un incesante peregrinaje a través del mar y la tierra. Todos deseaban poseer esa maravilla vegetal. Los extrangerons envidiaban semejante tesoro a los habitantes de la montaña sagrada en la que la diosa se había refugiado. Algunos quisieron apoderarse de la pequeña orquídea y recolectores salvajes destruyeron incluso los ejemplares de Macodes petola que no se podían llevar para ser los únicos y afortunados propietariosde tan inestimable tesoro. ¡En mal momento lo hicieron! Su dicha fue más breve que la vida fugaz de la petola sobre las rocas. En vano le prodigaron sus atenciones, perfumes y plegarias. Se marchitabade día a día y muy pronto sus sacrílegas manos no tuvieron ya otra cosa que cuidar que raíces informes. afortunadamente, éstas fueron recogidas por la diosa- que según parece, conocía ya la ley de la influencia del medio sobre las plantas- , quien devolvió las raices moribundas a la piedra en la que había dejado aquella vez su chal y las hizo revivir con su aliento. Una vez que surgieron los primeros brotes, dejó la orquídea al cuidado de las hadas de la montaña, antiguas protectoras de su petola.
"Esa es la razón, añade, no sin ironía, el botánico holandes, por que la encantadora anectóquila, Macodes petola, muere siempre que es cultivada lejos de su país natal, en particular en nuestros invernaderos."
Atlas Ilustrado de las Orquideas - Marcel Lecoufle

jueves, octubre 22, 2009

Como fijar una orquídea a la maceta. (II)


En esta parte coloco fotos del gancho y algunas orquídeas en maceta sujetas con este método.


Detalle de la punta del tutor


Quedaría más o menos así!!!


Detalle del amarre en la planta




Con el tutor


Planta fijada con gancho, detalle de la pinza en la maceta.









Espero les guste y ayude!!!

miércoles, octubre 21, 2009

Como fijar una orquídea a la maceta. (I)

La operación de trasplantar orquídeas suele hacerse cuando la planta ya no tiene mas sitio para crecer o cuando las raíces llenan la maceta. Esto varia según la planta, por lo general entre 2 o 3 años. Hay varias cosas a tener en cuenta para el trasplante; el sustrato, el recipiente, el tamaño del recipiente, entre otras; todas estas dudas suelen aclararse buscando en internet o en libros (o con un amigo!) .
Dentro de toda la explicación que recibimos también nos mencionan que la planta debe quedar bien sujeta, pero hasta ahora no he visto mucha información de cómo lograrlo, así que anexo como me enseñaron a fijar una orquídea en la maceta. Solo se necesita un poco de habilidad con las manos!!! El método consiste en hacer un gancho de la siguiente manera:
1.- Conseguir un alambre de 40cm aproximadamente (yo uso una percha para ropa)
2.- Doblar uno de los extremos en círculo, el otro extremo doblarlo aprox. 12 cm hacia adentro. 3.- Doblar hacia arriba este último extremo ( a unos 6cm)4.- Al doblarlo completamente toma forma de pinza o clip. 5.- Por último haz un pequeño doblez en la mitad del alambre que está mas recto.
Arreglarlo para que se vea de la siguiente manera, cerrar bastante el gancho para que haga presión al engancharlo a la maceta.
De esta maneta nos quedaría un gancho con tutor para la planta.




dibujos facilitados por www.orquideasdevenezuela.com

viernes, septiembre 11, 2009

MI NUEVA AVENTURA !!!!

En esta primavera decidí retomar mi afición por las orquideas. He podido soportar, por ires y venires de la vida, no ver su presencia en casa.... para mi no solo es una afición sino un vicio, tanto que despues de decidir comprar la primera orquidea en España, soñaba como niña antes de ir a la playa!!! ... me entienden??? seguro que si!

En Venezuela fué un gusto tenerlas en mi jardín, y tambien fué muy facil cuidarlas, el clima era perfecto... yo solo las consentía, las miraba y las regába. Pero aquí será todo un reto, lo cual me encanta!!!

Bien, despues de cuatro meses me he controlado mucho y he reunido solo 4 plantas (tres Phalaenopsis y un Oncidium), todas son híbridos comerciales (muy comerciales, están en todas partes). He tenido miedo a perderlas; la primera la coloqué en el patio de luces de mi piso; pero mi sexto sentido me decía que no le gustaba, así que despues de mucho pensar (fue difícil, sobre todo por mis hijos), las coloqué en mi salón frente a la ventana. Ahora están las cuatro ahí!!!

Claro está, los cuentos no acaban aquí. Ya he visto pulgones, caracolitos, quemaduras; vaya que me he llevado mis sustos, unos por que las plantas venían con los "problemitas" y otros por mi culpa (quemaduras)…. ah! y se me olvida el mayor de los problemas: ESPACIO!

Mis vivencias en tan poco tiempo, más ver el blog de muchos apasionados como yo, es lo que me ha llevado a lanzarme a la aventura de crear y mantener este Blog. Necesito compartir todo esto y que muchos de Uds. puedan compartir sus experiencias tambien.

Espero nos sirva de muchos a todos, los invito a ver el blog y enviarme sus comentarios.

Betina Jorge Carral